Actualmente en el mercando disponemos de una gran variedad de luces tanto para poder ver cuando circulamos con una potencia lumínica increíble como dispositivos traseros que nos hacen visibles para el resto, incluyendo algunos con pequeños laser que marcan una zona de seguridad en la oscuridad de la noche.
Pero hasta ahora no había visto un dispositivo tan simple y útil a la vez como una luz de freno trasera para la bici.
Su instalación en segundos es tan simple como instalar el dispositivo en el hueco que queda de cable entre el tope y uno de los brazos de la pinza de freno, de tal forma que cuando frenamos esta distancia se reduce comprimiendo el mecanismo y accionando la luz de freno.
Algo muy útil para los ciclistas de carretera y de ciudad para evitar los sustos cuando vas despistado y terminas comiéndote al compañero.
A diferencia de algunos dispositivos similares que hay en el mercado que funcionan en base a un acelerómetro interno, este dispositivo diseñado por Sigma tan solo es válido para los frenos de acción mecánica.
La luz resistente al agua, pesa 7 gramos y es alimentado por una pila de botón 1015 que nos asegurara unos 100.000 procesos de frenado. Está disponible en cinco colores, con un precio de US $ 9.99.