No estoy de acuerdo con encerrarse en las habitaciones…. El mundo solitario abstracto de cada uno debe de ser el resultado de sus paseos… Mirar para poder ver y para poder elegir.

Forugh Farrojzad

Desde un tiempo a esta parte me siento mas vivo, con más ganas de moverme, conocer lugares nuevos, sentir, vivir, salir.  Este sábado tenia en mente un montón de rutas con varías opciones para salir, elegir resulta difícil, me cuesta decidirme y al final opte rescatar la idea de ruta pendiente de la semana pasada gracias a que Dani se animó a acompañarme, pero solo con una condición hacer base, rodar a ritmo quema grasas sin pasarnos de pulsaciones, jejeje fácil es decirlo.

Hay día que uno se levanta y tiene la cabeza en otro sitio, hasta tres veces me costo subir en el ascensor con la bici para coger cosas que me dejaba en casa primero me dejo el agua, después me dejo los guantes y al final me dejo las gafas, cuanto daño hace la semana laboral a las cabezas. Al final con 15 minutos de retraso salgo de Alcorcón con un frío del carajo para un día de pura primavera que no se cansaron de anunciar para el sábado, pero yo voy helado de frío hasta la cuesta de cuatro vientos que me puso la temperatura en orden y las piernas comenzando a rodar, me cuesta siempre mucho empezar he de confesarlo.

Mientras espero a Dani en la parada de autobús de Aluche pasa una gran cantidad de ciclistas, muy abrigados, como yo mas o menos, en piratas y uno de riguroso verano, estoy seguro que no va a parar en toda la salida para no quedarse helado, los hay optimistas o de Bilbao como JJ.

Comenzamos nuestra ruta y al pasar por la parte de atrás del aparcamiento del Zoo nos sorprende un culito precioso enfundado en unos pantalones cortos ajustados nivel “marco hasta la goma del tanga” sustentado por un par de piernas enfundadas en una medias de rejilla de impresión., no pude fijarme en mas, su culito de alquiler era perfecto. Como yo siempre que paso por esta zona voy por la parte de abajo le miro a dani que luce sonrisa socarrona y digo “ya se porque querías venir por aquí” que pillín.  Esta vez salir de la CDC se me hace más ameno y la verdad entre la cháchara llegamos a Valdelatas sin apenas darnos cuenta. La cantidad de ciclistas que nos vamos encontrando es espectacular para la época del año que es y lo mejor de todo, la alegría del carril la cantidad de féminas que ver pasar y te pasan a unos ritmos de infarto todas bien escoltadas, así como las que empiezan y las ves sufrir con una sonrisa en al cara, y eso es malo, ya estas enganchada a esto amiga.

La subida a hasta colmenar no se me hace pesada como otras veces e incluso la disfruto, intentamos ir con las pulsaciones bajas pero en mi caso desde hace muchos minutos, vamos desde Aluche he dejado la zona de quemar grasa por mejora física y eso no es nada bueno para lo que busco, pero es que es tan aburrido ir al relentí.  Lo mejor de alcanzar colmenar viejo y enfilar el carril bici hacia soto son las vistas de la sierra con el embalse de Santillana en primer plano, la cuerda larga luciendo una manto de espectacular de nieve esta en su mejor momento para disfrutar de una buena travesía invernal, bueno si no fuera por el riesgo de aludes en la zona de dos hermanas claro.

A nuestro ritmo pachón pero constante llegamos hasta Manzanares en donde nos damos un homenaje a base de coca-cola con donuts, eso si zero para no engordar. Tras el desayuno continuamos nuestra ruta hacia Cerceda, la ligera cuesta me hace subir las pulsaciones a tope, los kilómetros y las cuatro de ruta comienzan a pasar factura. La subida hasta la gasolinera una vez dejamos Cerceda hace que me salga de rango de pulsaciones, le digo a Dani que bajo el ritmo para recuperarme, pero noto que mi corazón esta muy revolucionado y aún que baja a pulsaciones normales no consigo ni en bajada meterme en zona base. Al llegar a colmenar comienzo a encontrarme algo mejor y me dejo caer la mayor parte del tiempo sin forzar las pulsaciones, tan solo entre Tres cantos y Telecinco en donde nos pasa un ciclistas al principio muy rápido con muchas ganas pero que con los das collejas en forma de cuestas de la risa que te mete el carril vemos como no tardamos en darle caza y de nuevo Dani se lanza a por el en cuanto ve que es fruta madura y no falla el tío.

Con casi 130 km en las piernas rodamos por la casa de Campo de nuevo y es cuando comienzo a sufrir, mas de pensamiento por recrear en mi mente lo que queda que por las sensaciones que transmitía mi cuerpo que eran, podríamos decir que buenas. Y la verdad que no me resulto tan pesada la salida de la casa de campo ni la subida hacia Aluche en donde me despedí de Dani.

De nuevo solo hacia casa, ruedo en modo piloto automático, ya ni siento ni padezco pero si he de confesar que las subidas del barrio de pozo del agua cuando ya tienes 140 km en las piernas son una putadilla pero es más la ansiedad que tienes por llegar que el sentimiento de cansancio en las piernas.

Al fin llego a casa y me encuentro de nuevo con mi vecino que me vio salir hace 7 horas, me mira y se ríe sin entenderlo cuanto le digo el kilometraje 146 km, claro que tampoco me entiende cuando me ve salir a diario con un frío que pela pero como dijo Michael Ende Las pasiones humanas son un misterio, y a los niños les pasa lo mismo que a los mayores. Los que se dejan llevar por ellas no pueden explicárselas, y los que no las han vivido no pueden comprenderlas.

Track de la ruta