La libertad y salud son prendas de gran valía, ninguno las reconoce hasta que las ve perdidas.
Melchor de Palau.
Una gran frase para los tiempos que vivimos, no somos capaces de valorar lo afortunados que somos hasta que un dolor o unas moleslas en el hombro, seguramente una vieja lesión que de vez en cuando me recuerda las palabras del traumatólogo, Podrás seguir haciendo lo que haces en la medida que aguantes el dolor, con periodos de descanso y con cabeza.
Lunes, toca ir a nadar pero el dolor de hombro me avisa que no es bueno forzar las circunstancias, cambio nadar por andar, es solo cambiar una letra de la palabra y la postura en la que haces el ejercicio, necesito despejar la mente. En lugar de música vuelvo a los podcast, creo que estas salidas tendría que contar como entrenamiento doble ya que muchas veces nos olvidamos de entrenar la cabeza es muy importante. Voy escuchando el Episodio 56 de Hijos de la resistencia, dedica a las herramientas psicologica para rendir mejor tanto en el entrenamiento como en la competición. La charla con J. A Infante @psicoinforma_ es de lo mas interesante te lo recomiendo https://go.ivoox.com/rf/60279717 .
Martes, llego tardísimo a casa me levanto con un dolor intercostal molesto quiero salir a andar pero me siento agotado, prácticamente me caigo de sueño y termino rendido en casa.
Miércoles, parece que el dolor va a menos puedo hacer una sesión de ejercicios de fuerza con las bandas elásticas, el hombro de derecho se queja un poco cuando le toca hacer fuerza pero consigo terminar una sesión suave, algo es algo.
Jueves, Con menos dolor me puedo subir a la bici completar el entrenamiento de bici, 25, 45 km de un entrenamiento suave pero divertido, una vez que dejas los 20 minutos de calentamiento de aumento progresivo te centras en hacerlo bien y esta vez no consigo todas las estrellas de zwift por la sesión de entreno bien realizada, hay semanas que nada sale bien.
Viernes. Me cuesta la vida salir a correr, creo que me apunte al club para obligarme en días así a entrenar. Al final saco motivación y ganas para ponerme las zapatillas y por lo menos hacer el calentamiento. Al final me anime y lento, muy lento lo pude completar, 9, 34 kilómetros y me faltaron 6 segundos para llegar a la hora justa de carrera, pero de verdad al limite, no podía más.
El sábado me quedo dormido, muy dormido y me pierdo el entrenamiento de natación, al final me lío haciendo cosas atrasadas y como no he tenido contacto con nadie en 6 días prácticamente de aislamiento puedo comer con mis padres que hacia meses no lo hacia.
El domingo ya sabéis lo que paso si habéis leído la entrada de un domingo tonto lo tiene cualquiera, yo creo que al final todo sale de acuerdo a como vives tu vida, días raros, semanas raras y malas decisiones, este se parece al final de con faldas y a lo loco.
El maestro Bruce Lee ya lo dijo Una meta no siempre se hace para ser alcanzada, a menudo sirve simplemente como objetivo. Tengo que hacerme con uno sin duda.