La realidad existente no puede realmente ser rechazada ni aceptada. Huir de ella es como tratar de huir de tus propios pies. Aceptarla es como tratar de besar tus propios labios. Todo lo que hay que hacer es mirar, comprender y estar en paz. «La oración de la rana» (1982).

Anthony De Mello

En unas horas pasaré un calor sofocante, pero tras apagar el despertador busco un rato mas el calor del nórdico de verano que uso en la furgoneta cuando duermo en ella. Hoy me despierto en Torla, mi refugio para pensar y lamer las heridas que por idiota me voy auto infligiendo

Que poco dura el frescor mañanero en el pirineo, eso y la asignatura de madrugar los fines de semana la sigo teniendo pendiente, me puede la tablet al despertar. Quiero hacer la trepariscos saliendo desde Torla, el primer puerto me pilla ya mal de calor y el segundo seria una tortura, quiero sufrir pero poco. Optó por ir hasta El Valle de Otal, salgo del camping Ordesa mi campamento base para estos días y noto con agrado el ajuste de rueda que me han realizado en carpizo va de lujo. Con apenas 7n kilómetro en las piernas y sudando la gota gorda, unos senderistas me animan, “ vete al bar, ya hemos cerrado arriba”, pero yo sigo hasta el desvío de Burjaruelo donde el río ruge, con menos ímpetu que otros años pero dejan aún una estampa increíble.

Los primeros metros de hormigón rallado son terribles, el calor y el tráfico algo más intenso del fin de semana me estresan un poquito, respiró hondo, pronto el filtro de la hora al coche dejará solo la montaña para los que nos interesa disfrutarla. El agua de la fuente del cruce brota helada del caño, repongo de líquido mis bidones y comienzo la ascensión baja la atenta mirada de las vacas, arremolinadas todas juntas en la pradera.

Hace calor, mucho calor, pero se agradece un ligero soplo de aire que hace que el marcador pierda los 30 grados. Subo genial con el nuevo neumático taqueado de la gravel, que me permite incluso ponerme de pie en zonas algo complicadas. El 32 que le he puesto es lo que más marca la diferencia y me hace disfrutar del trayecto, del paisaje, del sonido a naturaleza sin editar, de los olores a pirineo, de los cursos de agua y de mis demonios internos. No haber ni siquiera intentado hacer el triatlón súper sprint me tiene verdaderamente jodido y afectado. Bien es cierto que estaba preparando todo para ir cuando leí los recortes de kilómetros en ciclismo y carrera a 5 km bike y algo más de 1km el run lo que terminó por hundirme definitivamente, ¿Era eso lo que quería para mi primera vez ?. No es excusa pero la verdad es que he gestionado fatal esta crisis existencial.

Un poco antes de coronar bajo una sombra me tomo un barrista energética y con un último esfuerzo me planto en la puerta que da acceso a mi paraíso. Ya con los demonios en los infiernos y la sonrisa luciendo en mi rostro me dirijo el fondo del valle, esta vez sin marmotas, pero con las ganas y el propósito de meterme bajo la cascada. Y en nada me planto frente a ella tras portear unos cientos de metros la bici. El agua está deliciosa, fría pero no duele como otras veces, una pareja le pido a una preciosa joven en bikini me haga una foto, me dice que vale pero me tengo que meter, le digo que llevo el pañal puesto y no puedo, se ríe y me hace la foto.

Charlo un rato con ellos, disfruto del agua fría calmando mis piernas y tras despedirme retomo el camino de vuelta, hacia el calor, hacia el polvo, hacia la multitud de fin de semana y vacaciones.

Mientras repongo agua, un hombre le dice a su mujer, cariño no podemos hacer fotos, no hay cobertura, le doy vueltas un buen rato, seguro que hay una explicación lógica, pero no caigo.

Katherine Neville Escribió en Riesgo Calculado, Los que no puedan mantener el ritmo de la revolución tecnológica, se encontrarán con que ellos mismos se han vuelto obsoletos.

Track de la ruta.