Las grandes decisiones de la vida humana tienen como regla general mucho más que ver con los instintos y otros misteriosos factores inconscientes que con la voluntad consciente y bien el sentido de razonabilidad.

Carl Jung

Escucho gotas de lluvia golpear sobre el alféizar de la ventana mientras voy recobrando la consciencia tras el sueño reparador. Faltan unos minutos para que suene el despertador, fuera hace frío, llueve y la oscuridad reina aún en el horizonte, medía vuelta bajo el abrigo del edredón y caigo, he quedado con Jaime para montar por Arroyomolinos y esta lloviendo, eso se traduce en barro y las ganas de montar se me van derrumbando como un castillo de naipes. Mientras desayuno el mando un whatsapp a Jack “ Jaime ha estado lloviendo y esta todo empapado como lo ves de barro ?”, un par de sorbos de café y tengo la respuesta de Jack “ parece que ha llovido poco, no ?” ummm…, eso quiere decir que mueva el culo que hay ruta, pero insisto por si mi pereza tiene alguna posibilidad de vencer el envite “ si, pero ya sabes como se pone esto con cuatro gotas” pero no tarda en llegarme el órdago a la ruta “ Te espero, Jajaja”  no hay opción a la pereza.

Si te apuntas al soplao hay que entrenar y necesitas amigos como Jaime para hacerte vestir de romano y salir en días tan inciertos como este. Monto el portabicis al coche, y al ir a montar la doble veo que el freno trasero ha cogido aire, una semana más sin estrenar los neumáticos nuevos, la cuelgo y bajo mi fiel GT con unos neumáticos sin dibujo y al coche.

Al llegar a Arroyo ya me esta esperando Jaime, la verdad es que el cielo luce esperanzador y tampoco hace tanto frío como esperaba. Comenzamos la ruta y tenemos los dos problemas con el track para intentar seguirlo, para esta ruta vamos a usar un track de un gran conocedor de la zona llamado Ingelmo y su track La silvestre de Arroyomolinos. Una vez ubicados ponemos rumbo al monte de Batres, un destino que a pesar de llevar años en la zona Sur confieso hoy ha sido la primera vez que he rodado por sus sendas. Al llegar al monte un coche de los forestales esta aparcado a la salida de uno de los senderos pero bueno de momento por esta zona se puede rodar. La pista nos dura poco en seguida Jaime se lanza por una de las sendas que salen a mano derecha, le sigo y comienzo a agradecer el que me animase a salir de ruta, espectacular. Lastima que pronto me de cuenta de las limitaciones que tenia mi bici y el estado del suelo, al tercer giro sorteando un buen reguero me doy cuenta que no puedo abusar del freno trasero no tengo tacos y la rueda delantera mas que rodar desliza a su aire sin nada de agarre lateral, le busco los límites, pero no da para seguir a Jaime ni de lejos, entre que baja mucho mejor que yo, tiene neumáticos y se conoce las sendas soy como una abuelita con un coche de los de sin carnet.

La primera ha estado a pesar de los problemas genial, es la senda que baja por el barranco del pastor, Jaime se ríe y me asegura que ahora ya no abra tanto barro y nos pegamos una subida de aupa en algo que podríamos definir como lodo de aupa pero que me ha encantado. Esta ruta es muy exigente, apenas tiene unos metros de llano cuando estas subiendo o bajando de nuevo y el barro en combinación con zonas de arena te revientan. Claro que yo tampoco estoy ahora en mi mejor momento pero por lo menos la rodilla que he dejado descansar esta semana se esta portando sin apenas indicios de dolor, solo cuando la fuerzo en exceso y tengo problemas con el barro y las calas que me obligan a pedalear sin poder engancharlas.

La subida tenia su regalo en forma de senda de nuevo espectacular y divertida por la zona de Dos hermanas hasta terminar rodando cerca del río Guadarrama en donde encontramos a los primeros bikers del día aún con sus monturas inmaculadas.

El Track de Ingelmo nos conducía hacia las Cárcavas de los Corrales pero no tengo piernas para tanto en las condiciones que esta el terreno y nuestra medía por todos los problemas que tengo es patética por lo que dejamos este bucle para otra ocasión. Subimos de nuevo hasta el monte de Batres por una senda exigente que descabalga por tracción un par de veces y me gustaría intentar en mejores condiciones, últimamente me ponen las subidas.

Como nos quedan algo de tiempo sobre la hora que hemos puesto de regreso decidimos dar un paseo charlando hasta Moraleja de Enmedio para volver de nuevo a Arroyo con viento cada vez más fuerte y un frescor salvaje serrano que recomendaba ir buscando la ducha.

Jaime me ha enseñado una ruta genial que quiero repetir sin barro y sin duda es el amigo que merece la pena tener a tu lado cuando necesitas un apoyo y que hace grande las palabras de Khalil Gibran No busques al amigo para matar las horas, sino búscale con horas para vivir. En nuestro caso para vivirlas como más nos gusta sobre una bici o charlando.

 Track de la ruta gracias a Ingelmo