“Siempre fui esa oveja negra
que supo esquivar las piedras que le tiraban a dar,
y entre más pasan los años
más me aparto del rebaño porque no sé adonde va.”
Marea ( Como el viento de Poniente)
Cuando quiero pensar siempre me pasa lo mismo, me monto en una bicicleta y pedaleo, en ocasiones sin rumbo fijo y otras buscando algo nuevo, diferente con lo que alimentar el alma.
En principio pensaba acudir a la ruta de Isra pero la amistad tiene sus noches sin luna en la que brillan más intensas las estrellas pero notas la ausencia de la dama de la noche. Siempre he tenido presente las palabras de Sylvia Plath “ Si nunca esperas nada de nadie nunca te decepcionarás ” pero vivir con un escudo permanente de escépticismo no crea que sea la mejor manera de disfrutar de la vida, hay que dejar un margen para la sorpresa.
Por fin la primavera se hace sentir y nos regala un día de esos que si fuera una demo, la compraríamos como tiempo ideal. Salgo de casa con un maillot de manga larga y pantalón corto, con las primeras pedaladas me surgen también las primeras dudas sobre si habré acertado con la combinación ya que el beso mañanero es de natural fresquito.
Salgo de Alcorcón rumbo a Getafe por el parque polvoranca, llevo el MP3 puesto ya que el camino es conocido y para calentar nada mejor que marea “… Ya son demasiados abriles, para tu amanecer desbocao, mejor que me olvides, yo me quedo aquí a tender mi pena al sol, en la cuerda de tender desolación” en ocasiones pienso que Marea canta en sus letras fragmentos de mi vida.. Pedaleo a buen ritmo, bueno algo casi decente sobre los 22 km/h por carriles perro y señoras que se asustan por ir circulando por la acera y los maridos medio seniles te gritan “ ..no ves la señal, prohibido bicis” señalando una señal azul con una bici dibujada, señor que cruz.
Dejo Getafe bordeando la base aérea para tomar la pista que parte del cementerio hasta Pinto, cruzo el pueblo intentando circular por los carriles bici, bueno eso pienso que debajo de todos los coches que había aparcados el ayuntamiento puso un carril, o eso marcaban las señales verticales que obligan a sortear a coches que bajan en sentido contrario, país de chapuzas. Al final termino en el polideportivo que cruzo por el Parque municipal Juan Carlos I. Este parque me dejo ya en las afueras, en una pista que es en realidad una cañada, El Arroyo de la Cañada, nombre que hace referencia a la “Cañada de los Cerros de Castilla”, una de las vías pecuarias de las que existe documentación histórica más antigua. Continuaba hasta Alcorcón y tenía una milla de ancho. Pero ya desde la antigüedad pasaba por aquí una via que se dirigía a Avila desde el Mediterraneo, probablemente usada por Aníbal para volver a Cartagena de su expedición a Salamanca en el año 217 antes de cristo. Vamos al final todos los taros aventureros de esta mundo terminamos pasando por aquí.
La pista me dejará sin problemas en Ciempozuelos y a las puertas del parque regional del Sureste. Intento meterme por una pista para no rodar por la M-404 pero es imposible, un canal de riego impresionante me impide el paso, por lo que vuelta hacía tras y a disfrutar de la carretera en donde me cruzo con dos corredores del Astana y la cara de uno me era conocida pero claro yo de ciclismo de carretera nada de nada. La carretera me deja en Titulcia en donde paso por el puente de hierro sacando una bonita foto del río Jarama con el pueblo de fondo.
Un par de kilómetros de carretera me dejaran en una de las sorpresas del día que por inesperada me han dejado un gran sabor de boca de esta ruta. Se trata de la laguna de San Juan, todo un oasis en el seco sur madrileño. La laguna tiene una profundidad que oscila entre los 70 Cm y los dos metros, el cuidado que se tiene sobre ella la mantienen preciosa.
Rodar por la pista es una delicia, la mirada se pierde por los campos de cultivo de las vegas y por los innumerables senderos que se bajan de los cerros y te invitan a ser rodados, en uno de ellos pude divisar a dos bikers que seguro se disponían a degustar una de estas golosinas.
La pista va cobrando pendiente hasta dejar de ser una broma y transformarse en una subída sería para tener unos 60 kilómetros en las piernas. Tras la subida que me deja unas vistas maravillosas de las vegas, me encuentro a escaso par de kilómetros de la vía verde del Tajuña, pero eso ya sera otra historia, ahora toca volver y disfruto de un olivar maravilloso y una bajada rápida hasta Vallequillas Sur y Norte que los dejare tras ver pasar una concentración de motos antiguas que fue todo un espectáculo.
El Sol me esta pegando de justicia y ya siento estar un poco cansado de tanta luz, pienso que una nube de vez en cuando en el cielo es hasta agradable. Bordeo el parque de la Warner y sorteo como puedo los vallados de esta zona que me impiden seguir la ruta bien. Decido ir bordeando las vallas hasta salir de nuevo a la carretera, pero tengo que usar una apertura manual practicada en la alambrada ante la ausencia de puerta.
La M-841 me dejara en Pinto de Nuevo y como en la entrada hay un Mcdonal me tomo una bebida grande de coca-cola y mi bocadillo.
El retorno a Alcorcón es por el mismo recorrido, se ha levantado algo de viento pero hace calor, mantengo mi ritmo lento pero seguro, al llegar a Getafe un poco antes el cuenta marca ya la cifra mágica 100 Km, pero mi culo ya a los 80 me ha dicho que esta hasta los vecinos de enfrente de la ruta. Alterno pedalear de pie con largos tramos sufriendo en silencio la penitencia de los ciclistas o haciendo callo. En el parque polvoranca me pongo de nuevo el MP3, esta parque sin música es insufrible y disfruto de un par de senderos divertidos.
Al llegar a casa vuelve a sonar la canción con la que inicie la jornada “.. Amaneció, la ví irse sonriendo, con lo puesto, por la puerta del balcón, el pelo al viento diciéndome adiós, porque decidió que ya estaba las tetas de poetas de bragueta y revolcón de trovadores de contenedor.” pero es lo que tiene la soledad que siempre regresa para acomodarse en el colchón. Ya se pregunto Carlo Dossi una vez “ ¿Por qué se rehuye la soledad? Porque son muy pocos los que encuentran compañía consigo mismo.”
Buena panzada de kms, si señor. Esta misma ruta la hice desde Pinto y me salieron….. 60 km (aprox). Un saludo.
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Buen tute te metes si señor, me tienes que enseñar esas vegas de la zona sur de Madrid. Muy buenas fotos.
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