Azuqueca-Los Santos con frío Siberiano

“Creo que estoy en libertad para sentir y para amar. Creo que tengo lo que pedí, no me lo dieron, yo lo conseguí. Y aunque ahora siento un poco de frío, creo que el tiempo me traerá el abrigo.”

Celeste Carballo

Cuando estoy apunto de salir del trabajo para ir hacia la estación de tren en donde he quedado con Lorenzo para dar una vuelta en bici como me he propuesto los viernes, un compañero me mira y me dice “… tú no has salido hoy a la calle ¿verdad?, hace un viento gélido que te pasma, como para ir a montar en bici”, cierto desde hace 6 horas que estoy en el curro no he visto la luz del sol ya que trabajo en un zulo, pero después de levantarme a las 6 de la mañana para cargar la bici en el coche y preparar todo no voy dejar de salir por un par de grados negativos.

La verdad es que esta vez ya en la calle y poniéndome los calcetines, el buff y los guantes me lo pensé dos veces esto de cambiar bici por siesta que es lo que tendría que estar haciendo en un día como hoy es para mirárselo.

Lorenzo es otro aventurero de la bici, con el culo pelado de hacer kilómetros y un montón de anécdotas, kilómetros de pedaladas y aventuras que ha vivido como para no aburrirte en unas cuantas rutas.

Para esta jornada me ha propuesto ir hacia los Santos de la Humosa ya que me quiere enseñar una zona que esta muy bonita en este tiempo. Salimos de la estación para ir entrando en calor rodamos a buen ritmo paralelos a la vía del tren, le comento a Lorenzo que menos mal que ha parado el aire que se rueda de lujo ahora, a lo que me responde con una sonrisa de oreja a oreja “si, si ya veras cuando volvamos si ha dejado de soplar, ahora lo tienes de culo, te esta empujando y parece que no sopla pero veras la vuelta. Y no me mintió, fue llegar a la estación de Meco para cruzar la A-2 por el puente y apunto estuvo el aire de tirarnos a los dos, madre mía con Eolo.

La zona por la que rodamos es la misma que hace algo menos de una año me enamoro cuando la recorrí por primera vez con Israel, le comento que mi tío siempre venia por esta zona a traerme raíz de Palulu que me encanta y le pregunto de donde la sacan ya que en esta zona abunda y lo que son las cosas levanto la mirada y veo a un hombre con un azadón al que saluda mi compañero con un “ que tal, sacando raíz de Palulu” je jeje, así es como se aprende con la practica, ¿quien dijo que la bici no es cultura?. Mientras rodamos junto a las escarpadas paredes del monte que sustenta los santos de la humosa mi compañero me va contando que los agujeros que hay en la pared son de bala ya que los militares hacían prácticas de tiro en esta zona.

Comenzamos a subir por pistas en perfecto estado, hace frío y se agradece la subida, hasta que mi termostato interno rompe a sudar y el de las piernas comienza a decir que un descansito no vendría nada mal.

El descansito lo tomaríamos al llegar al mirador que hay en lo alto de los santos con una vista impresionante del pueblo y del corredor del Henares, el día esta despejado y se ve claramente el Ocejón y la sierra Madrileña.

El frío hace que las paradas sean cortas, apenas cruzamos cuatro palabras con un biker que descansas también en el mirador cuando enseguida nos ponemos en marcha para disfrutar de un senderito muy breve pero muy disfrutón que enlaza con una zona de breves subidas y bajadas divertidas alternado pista con pequeños trozos de senda que nos dejará frente a la vías del AVE y ante unas praderas verdes, preciosas que lucen magníficas bajo un cielo azul gélido de enero.

La verdad es que el frío nos ha tocado un poco y las ganas de estar sobre una bici no son tantas como cuando el calorcito anima más a disfrutar sobre una bicicleta. Nos tomamos con calma la vuelta hacia los Santos de la Humosa para una vez bien abrigados afrontar una bajada divertida, muy rápida en la que tienes que estar vigilando constantemente una rodera una tanto traidora.

La vuelta como nos temíamos la hacemos sufriendo un aire helado en contra justo cuando las piernas ya están pidiendo el descanso.

Antoine de Saint Exupery dijo Si quieres construir un barco, no empieces por buscar madera, cortar tablas o distribuir el trabajo, sino que primero has de evocar en los hombres el anhelo de mar libre y ancho. Para Lorenzo y para mi el barco son las piernas, ponerlas fuertes para poder recorrer caminos y caminos, el anhelo de mar libre y ancho es lo que trabajamos los viernes navegando por estos mares de verde cereal.

Track de la ruta

Elevation Profile

 

Actividad: mountain bike

Distancia recorrida: 33,65 kilómetros
Altitud min: 560 metros, max: 883 metros
Desnivel acum. subiendo: 599 metros, bajando: 546 metros
Grado de dificultad: skill Fácil
Tiempo: 2 horas 41 minutos

 

Acerca de alakan

Dentro de veinte años estaras mas arrepentido de las cosas que no hiciste que de las que hiciste.Asi que librate de las ataduras.Naveja lejos del puerto seguro.Atrapa las huellas del viento en tus velas.Explora.Sueña.Descubre.MARK TWAIN.
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3 respuestas a Azuqueca-Los Santos con frío Siberiano

  1. El profesional dijo:

    Casi 3 horas montando en bici y solo 33km uffffffffffffff

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  2. alakan dijo:

    Ya ves no teníamos nada de prisa.

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  3. lorenzo dijo:

    esta ruta sin viento bestial e incluso subiendo al repetidor de anchuelo en 2 horas 15 minutos dura dura pero se hace.

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