“Es más fácil apoderarse del comandante en jefe de un ejército que despojar a un miserable de su libertad.”

Confucio

Pocas rutas son tan locas y alocadas como la que he vivido con Pantani este viernes, nos ha pasado de todo y nos lo hemos pasado genial, de la ruta solo es interesante un sendero de la Casa de Campo y la trialera del Pardo, pero de lo acontecido en el trayecto, trata esta crónica.

El Jueves a ultima hora de la tarde quedo con Pantani en ir a dar una vuelta e investigar la ruta de Alcorcn al Cerro de los ángeles por el pasillo verde del Manzanares, pero una llamada a primera hora de la mañana cambia los planes, tengo un track del pardo que investigar y le gusta la idea así que cambiamos hora zulu y quedamos en el tres aguas a la 10:00, y con una puntualidad increíble estamos en el punto de encuentro con cara de asombro ante un valle que cierra el acceso tradicional al camino de la casa de campo, menos mal que han abierto una “ puerta casera” en un lateral de valla y podemos continuar por el camino tradicional cruzando la Venta de la rubia y bajando hasta la casa de campo, aquí decidimos subir un poquito bajar por un gran sendero muy divertido con sus sube y baja, para empezar el año a lomos de un bike, no es la sierra pero te quita el mono.

Con la sonrisa dibujada en la cara nos enfrentamos al duro carril bici, duro por rodar en asfalto rojo, como le una vez le dije a Toni, estas son nuestras veredas.

Llegamos a la calle Braojos y subimos al pardo su valla, y como no, segunda decepción del día, han vallado nuestro querido camino que usamos para ir a tres cantos pegaditos a la valla y se lo ha agenciado un campo de golf, así los topos les joda el césped. Para compensar tanto expolio sin sentido nos han abierto la valla, pero el regalo esta envenenado ya que tiene sorpresa como los roscones en forma de subida intensa, tan intensa que la mala burra de Pantani rompa la cadena, esto seria una anécdota que se soluciona con un troncha y un eslabón rápido pero como somos dos taraos solo tenemos medio eslabón cada uno y no son compatibles, risas y llantos, risas cuando veo como esta el desviador delantero de Pantani, el muy animal lo hadoblado y es un “ ocho”, lo reparo como puedo, le uno la cadena pero se parte el único soporte sano que le quedaba a su troncha, así que los llantos son para Pantani que ve como el 2009 le pide una cadena nueva, un desviador y un trocha, jejeje son cosas que pasan.

Como ya estamos en el pardo decidimos tirarnos por un sendero trialeroso que nos deja flipados, maravillados, que giros, un tubo alucinante y una bajada en la que Pantani llego a decir madre mía en uno de los giros metí la bici sin ver que había al otro lado. Esta trialera esta divida en dos un tramo de bajada un breve pero intensa subida y de nuevo bajada súper intensa y divertida hasta llegar al tejar de Somontes, pues bien en ese tramo de subida, noto que no ha subido del todo la cadena, puede saltar, dejo de pedalear pero el pie no sale del automático, así que agarro a la bici y costalazo, ya tenemos el primero del año, un castigo de Dios por reírme de la desgracia de Pantani.

Como su cadena no esta para lo intenso del pardo ponemos rumbo a casa por un sendero precioso paralelo a la M605, que disfrutamos a tope, ratonero y divertido. El sendero nos deja en una rotonda, subimos un paso elevado y en la Urbanización Fuente de la Reina Pantani rompe de nuevo la cadena. No pasa nada, saco mi troncha del lidl y al sacar romper la cadena se rompe el punzón, estamos jodidos no tenemos troncha, la cadena en la mano y fuera de una ruta ciclista. Aquí se hace realidad una de las pesadillas de Pantani ya que tengo que remolcarle, el 2009 le castiga duramente, sabe que Jack Randall ahora tiene una nueva herramienta para castigarle, se cambio de ropa en el soplao y fue remolcado por Abakan, que triste, jejeje. Para tal fin usamos el cierre ventral de mi mochila y agarraditos voy tirando de Pantani en los llanos y el corre empujando la bici en las subidas, algunos nos miran, y Pantani les grita “no somos maricones, es que no tengo cadena”. Le preguntamos a unos cuantos Bikers del carril si tienen troncha, pero nos miran con cara rara. En la casa de Campo por fin nos cruzamos con un carretero que nos cede un troncha a la par que nos encontramos con Víctor y Helen, Reparo la cadena de Pantani, le agradecemos el favor a nuestro ángel de la guarda carretero y continuamos trayecto hablando con Víctor y Helen. En la salida de la casa de campo nos despedimos, ellos continúan por el carril y nosotros buscamos nuestro camino tradicional para salir y entrar de la capital.

El karma, deja de cebarse con nosotros y nos regala una visión angelical, dos hembrasenfundadas en prendas negras muy ajustadas, dos bellezas que nos dibujan una sonrisa maravillosa y un flujo sanguíneo extraordinario a un músculo que no usaremos. Siempre me han gustado los escotes, los generosos y los tímidos, ese canalillo que en forma de sendero te guía por los montes del placer y tras cruzar la llanura de la risa te adentra en el  valle del gozo, tiene una versión que también me pone, un jersey de cuello vuelto que ajustado como un guante esculpe la figura femenina dejando intuir la majestuosidad de su cuerpo.

Alucinados por la visión completamos el recorrido hasta la venta de la rubia en donde investigamos un camino nuevo, que no es una gran cosa pero bueno es valido, pero en el único repecho del camino Pantani rompe de nuevo la cadena, así que como estamos al lado del tren vamos a la estación para que Pantani compre el abono, pero en la RENFE no lo venden, así que le remuelco otro poquito hasta el metro sur en donde si puede comprar el abono, aquí nos despedimos tras una salida que pensamos repetir con más gente ya que el pardo es una autentica mina que tenemos muy olvidada.

 Track de la ruta