Cada uno de nosotros está siempre trabajando con el niño de tres años que todos llevamos dentro. Lamentablemente, nos pasamos la mayor parte del tiempo gritándole, y después nos preguntamos por qué será que nuestra vida no funciona.
Louise Hay
Paso demasiado tiempo enfadado, he pasado demasiado tiempo malhumorado y eso me ha impedido disfrutar seguramente de mejores momentos con mis amigos y familiares. Me hago mayor y cada vez más cascarrabias, ese niño de tres años del que habla Louise Hay esta sentado en un rincón, llorando porque no le hago caso. Ya no juego con el y esta triste. Paso demasiado tiempo en la carretera de casa al trabajo y mucho más trabajando para que el piso sea mes a mes mas mío que del banco.
Cumplir años me sienta bien, me gusta porque puedo sentarme junto al niño que con lágrimas en los ojos me mira buscando mi atención. En el día de mi cumpleaños me paro a reflexionar de lo bueno y lo mano del año, de lo que no me gusta de mi, de lo que puedo cambiar y lo que tengo que cambiar en breve. Puedo reconocer mis errores y ponerles remedio, puedo cerrar los ojos y pasar a cámara rápida los mejores momentos de un año en el que la bici ha sido la protagonista.
Ha sido el año de los viajes, el primero junto con mi viejo amigo JJ con el que recorrí el Canal de Castilla en su versión XXL, que a los dos nos gusta comer y eso de devorar kilómetros nos encanta. Un año antes me quede a mitad de camino y este por fin lo he terminado. Pero el verdadero viaje, el que supuso toda una terapia fue cuando en Mayo huí hacia el camino de Santiago cuando estaba al borde de una profunda depresión. Fui buscando la soledad del camino y me encontré grandes personas con los que compartí muchos días. Encontré lo que buscaba y al tercer día recuerdo que con los primeros rayos de sol de la mañana iluminando un precioso prado verde a los pies de un camino infinito para de dar pedales me baje de la bici, respiré profundo y me di cuenta que volvía a sonreír de verdad, podía cerrar los ojos sentir la calma en mi interior, había encontrado mi camino de nuevo y eso me dio las fuerzas que no tenia para llegar a santiago.
Las rutas domingueras han sido pocas, demasiado pocas, pero otro viaje esta vez a Ainsa me hizo darme cuenta de lo mucho que amo el MTB y disfrute como un niño, sintiendo muchas de las bajadas como autenticas experiencias religiosas llegando al éxtasis y destacar también un viaje muy añorado por mi que se resistía en el tiempo, el cual pude ver cumplido gracias a jorge que se animo a recorrer junto a mi el Alto Tajo y que nos dejo un recuerdo imborrable en la memoria tan fuerte que queremos repetir en cuanto nos sea posible.
Como no, gran protagonismo también ha tenido mi nuevo amor de carretera, mi choni flacucha con la que he iniciado una relación de amor apasionante. Juntos nos escapamos unos días al pirineo para vivir nuestro amor coronando El tourmalet, Luz Ardien y el pequeño paraíso entre los puertos de Soulor y Col D´Aubisque uno de los recorridos más maravillosos que he recorrido con mi flaca.
Otra de mis pasiones el senderismo se ha visto un poco arrinconado, renegado a un segundo plano pero que también me ha proporcionado grandes momentos con la travesía con JJ para hacer vivac en Gredos, la visita a Gavarnie y sobre todo mi querida Ordesa con la senda de los cazadores y un paz increíble en un septiembre extraordinario.
El año pasado me había propuesto preguntarme todos los días si la jornada vivida era la que había quería vivir si había muchos “no” seguidos cambiarlo y por desgracia los ha habido y seguramente habré gritado al niño de tres años de mi interior asustándolo muchos de esos días.
Ahora a las puertas de los 43 años, arrodillado ante el, le he secado las lágrimas y me ha sonreído, sabe que volveremos a jugar juntos, a divertirnos como sabemos y ver la vida con otra aptitud, de la mano caminando juntos para luchar un año más. Arthur O´Shaughnessy dijo que Cada edad es un sueño que se está muriendo o uno que está por nacer, yo quiero pensar que la mía es de las últimas.
Gracias un año más a todos por acompañarme y llegar hasta aquí.
Gracias a ti, por compartir tus experiencias bicicleteras con nosotros.
Felicidades y suerte para este año en el soplao y en todos lo que te propongas
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Felicidades
Date: Wed, 30 Jan 2013 06:18:04 +0000 To: squinal@hotmail.com
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Felicidades. Como siempre, un placer leer tus pensamientos y sensaciones.
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Felicidades, cada vez le leo tu blog a mi niño de tres años, se le ilumina la cara. Fue una suerte dar contigo y tus narraciones. Gracias por hacerme viajar sin salir de casa.
Lo dicho, felicidades por los 43.
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Sigo siempre que puedo tus crónicas bicicleteras y qué decir de esta entrada, de las mejores y más sentidas!
Ánimo en este año y a ver si como tu tiro palante, cojo ganas y me voy a hacer rutitas senderistas o con la bici!!!
Un gran saludo.
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Gracias a todos por las Felicitaciones 😉
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Felicidades atrasadas, De los textos más bonitos que te he leído, y en el que creo que todos nos vemos reflejados. Hoy debería estar recorriendo las Vegas del Tajo y del Tajuña, uniendo cuatro provincias en bicicleta (Madrid, Guadalajara, Cuenca y Toledo), en una de mis rutas temáticas. Toda la semana soñando con que llegara este día, y hace un viento de locos y peligroso para la flaca que debe torerar a los coches. Así que saldré a correr 1 hora y 1,5 de rodillo. Pero mi niño tiene una pataleta dentro de rabia que no me deja ni pensar. Sé que vendrán días soleados, calurosos, e impresonantes. Volveré al Collado de la Mina, a Francia, iré a los Dolomitas, e incluso haré la larga del Soplao, y me daré una vuelta por los Lagos de Covadonga, pero entre medias creo que hasta la semana que viene estaré enfadado porque mi ración semanal de felicidad, mi caramelo no ha llegado. Realmente no sé si me hace feliz mi pasión por la montaña y el ciclismo, porque me ayuda a desconectar del mundo, o me hace infeliz porque me hace aborrecer el mundo que nos toca vicir. En fin, gracias por compartir con nosotros este Blog. Nos vemos en la carretera.
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Hacia unos meses que no me pasaba por aquí a leer, y solo puedo decir que gracias a ti por llevarnos en tus viajes y rutas.
Yo también tengo bastante arrinconado ese niño más por dejadez mía que por falta de tiempo pero después de leerte volveré a intentarlo, tu choni y tu fuisteis algunos de los culpables de que picara con una flaca y hay que darle uso.
Tratare de olvidar la frase de «mañana salgo…» y me pondré las pilas para disfrutar todo lo que pueda.
Un saludo y gracias.
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